Roberto Osuna
Después
de un año de inactividad dentro de los cuadriláteros reapareció Julio Cesar
Chávez Jr. y de nueva cuenta su regreso estuvo lleno de polémica al darle los
jueces la victoria en un robo para su rival el texano Bryan Vera en Carson,
California.
En
pelea pactada a diez episodios “El hijo de la leyenda” fue dominado en la
mayoría de los rounds, pero tal parece que los jueces se hicieron de la vista
gorda y dieron el gane a Chávez en una pelea donde Vera fue quien impuso condiciones y llevo la batuta
de la misma; en cambio el Jr. se vio
pasado de kilos por lo tanto lento, víctima de la inactividad y solamente
contragolpeo teniendo algunos destellos
al conectar sobre la humanidad de su rival.
No
es la primera vez que el boxeo se llena de decisiones erradas ya que en los
últimos años sean visto peleas que no corresponde lo que pasa en el
cuadrilátero con lo que dictan los jueces. El boxeo no está exento de la mafia
que lo rodea, los intereses de promotores y la figura pública de algunos
deportistas han terminado por pesar más que el deporte en sí y no solamente el
boxeo ya que también lo hemos visto en partidos de futbol de la serie italiana
y en selecciones de Centroamérica donde el interés económico a sobrepasado la
legalidad del deporte.
Lo
ocurrido entre Chávez Jr. y Vera es otro granito negro más en la carrera del
Jr. después de estar envuelto en problemas de drogas, de indisciplina y ahora
con peleas donde es favorecido por los jueces hace que su figura se torne mas
llena de publicidad que de buen boxeo.
La
victoria para el Jr. deja que el teatro montado hacia su figura está más que
claro, de ver dictado los jueces la victoria sobre Vera la figura de Chávez
Carrasco se hubiera debilitado aun mas, ocasionado ´perdidas en los bolsillo de
los promotores quienes buscan peleas con rivales más atractivos para llevarse
cantidades de dinero mayores que las que ha conseguido el Jr. de lo que no hay duda es que si el sinaloense quiere seguir con
su carrera deberá prepararse a conciencia para sus próximos compromisos pues
con lo mostrado hasta hoy está muy lejos de los grandes boxeadores y gracias a
los jueces hoy su carrera no está al borde del abismo.
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